Ropa, dulces y electrónica: en Brasil, pocas marcas ofrecen tantos productos baratos como las tiendas estadounidenses, cuyo logo rojo y blanco forma parte de la decoración urbana. Fundada en 1929 por cinco inmigrantes estadounidenses en Río de Janeiro, siguiendo el modelo de los supermercados populares en los Estados Unidos, las tiendas se impusieron rápidamente en todo el país. Hoy, la empresa, que se ha convertido en el quinto mayor grupo minorista de Brasil, tiene más de 1.700 en 900 ciudades y emplea a 44.000 personas.
Pero ahora, desde enero, este éxito se ha visto empañado por un gran escándalo financiero. El 11 de ese mes, nueve días después de tomar las riendas de la empresa, se revela que el director general, Sergio Rial, identificó “inconsistencias contables” hasta 20.000 millones de reales (3.800 millones de euros). Después de la corrección, la deuda del grupo se duplicó, alcanzando los 42,5 mil millones de reales: una cantidad imposible de pagar. Posteriormente, el Sr. Rial renuncia y Americanas es puesta en suspensión de pagos.
Cinco meses después, la empresa se da cuenta de los hechos. El 13 de junio admite, en un comunicado de prensa, haber sido objeto de una vasta operación de ” fraude “ por la administración de Miguel Gutiérrez, quien la gobernó entre 2001 y 2022, antes de la llegada de Rial. Según Americanas, inflaba las ganancias mediante publicidad engañosa de contratos con proveedores o la omisión de préstamos en los informes financieros. Todo por bonos multiplicadores y dividendos mientras la sociedad se derrumba.
Reducción extrema de costos
El escándalo, uno de los más graves en la historia de Brasil, deja perplejo al empresariado. “ Esta es una gran sorpresa y una gran decepción para las empresas brasileñas.explica Pedro Wongtschowski, presidente del Consejo Superior de Innovación y Competitividad de la Federación de Industrias del Estado de Sao Paulo. No solo por la magnitud del problema, sino también porque es una empresa cuyos accionistas eran muy respetados. »
Apodados “los dioses del capitalismo brasileño”, los multimillonarios Jorge Paulo Lemann, Alberto Sicupira y Marcel Telles, que poseen el 31% de la empresa, se encuentran entre los cinco más ricos de Brasil. Junto al grupo Americanas, presentan un fondo de inversión, 3G Capital, que invierte en multinacionales tomadas, como el fabricante de ketchup Kraft Heinz, la cervecera belga AB InBev o el rey de los restaurantes de comida rápida, Restaurant Brands International, propietaria de Burger King .
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